Las entidades bancarias aún poseen en sus carteras inmuebles embargados a constructoras, promotoras o particulares privados. ¿Merece la pena adquirir alguna de estas ocasiones bancarias? Depende. Como todo, la compra de alguna de estas viviendas tiene sus ventajas, sí, pero no es oro todo lo que reluce, así que también hay una serie de desventajas que no hay que olvidar.
Los expertos coinciden en que cada vez es más complicado encontrar viviendas de bancos cuya relación calidad-precio sea buena: las mejores oportunidades se vendieron hace años (al inicio de la crisis, aproximadamente), por lo que encontrar algún inmueble interesante (fuera de precio de mercado y en buenos barrios) es muy difícil pero no imposible. Sólo hay que rebuscar mucho y muy bien entre las oportunidades que ofrece la banca…
Ventajas acerca de comprar una ocasión bancaria
Aunque la búsqueda para encontrar viviendas de bancos que merezcan la pena, todavía quedan grandes oportunidades, especialmente en las campañas de “rebajas”, que en las entidades bancarias se dan entre mayo y noviembre: si estás atento y buscas bien podrás encontrar descuentos de hasta un 30% o un 40%.
Esto se debe a que muchos bancos no logran vender los inmuebles de sus carteras porque aún están a precios fuera de mercado, en ubicaciones que no interesan a los clientes potenciales (en barrios periféricos o en pequeños pueblos) y son de segunda mano, de calidad media-baja. Para conseguir quitárselas de encima realizan estos descuentos tan agresivos durante dichas campañas de rebajas.
En función del tipo de vivienda que busques, esto puede ser una ventaja porque si deseas hacerte con una vivienda en una población costera (o cercana al mar), los pisos de bancos pueden convertirse en una gran oportunidad: en zonas turísticas cercanas al mar donde los precios eran muy caros durante la burbuja inmobiliaria ahora puedes encontrar verdaderos “chollos”, apartamentos con descuentos de hasta el 60% o desde 35.000 euros (mucho más económicos que hace 15 o 20 años).
Pero la que constituye sin duda la principal ventaja a la hora de comprar una de estas ocasiones bancarias es que la entidad pone más ventajas de financiación que para cualquier otro tipo de adquisición (particulares o inmobiliarias). Las condiciones preferentes en las hipotecas para comprar una casa de un banco pueden ser beneficiosas:
Desventajas de adquisiciones de ocasiones bancarias
Una de las principales desventajas de las viviendas que ofertan estas entidades es que, al tratarse principalmente de viviendas embargadas por el banco, su estado de conservación puede ser bastante malo (hay anuncios de pisos que ni siquiera tienen fotos debido a su mal estado), teniendo que invertir una gran suma de dinero para reformarla. Si lo que buscas es un lugar en el que entrar a vivir olvidándote de obras, puede que ninguno de sus inmuebles sea el que andas buscando.
Otro de los inconvenientes de comprar un piso del banco es que sus precios suelen ser menos negociables. Al comprar una vivienda de segunda mano, el precio de salida es más flexible si el vendedor es una inmobiliaria o un particular, con quienes se puede “regatear” para conseguir un buen descuento. Hay entidades bancarias con las que también se puede negociar el precio, pero es más complicado y el descuento (en caso de conseguirlo) menor.
Respecto a los precios de los inmuebles de los bancos, pensamos que son más económicos que los de una inmobiliaria o un particular pero no siempre es así: cabe comentar que el propio Sareb (el denominado banco malo), expuso que sus operaciones se realizan a precio de mercado y la OCU alertó de que las viviendas de bancos no son más baratas que las demás.
También hay que añadir que las condiciones preferentes para que el banco en cuestión te conceda el préstamo hipotecario suelen llevar asociadas ciertas cláusulas difíciles de cumplir. Cuidado con la financiación al 100% ya que en ocasiones suele ir acompañada de tipos de interés bastante más altos. Además, puede que para poder obtener el préstamo, la entidad obligue a pagar una cantidad al contado que no se tiene en ese momento, además de contratar seguros y otros productos, lo que hará que nos pensemos si merece la pena contratar alguno de estos productos o pagar más intereses por nuestra vivienda.